El coste de ser traicionero
Gavin se asomó a una ventana al amanecer y volvió a mirar el mundo con ojos nuevos. Ahora era consciente del verdadero coste de su acto de traición. No era simplemente la pérdida de una herencia o el daño a su fortuna; era la profunda comprensión de que el amor y la confianza incondicionales de un padre se habían visto alterados por el rápido señuelo de la riqueza. Había sufrido el verdadero coste.

El coste de ser traicionero
Restos de la relación
Gavin recorrió los ahora inaccesibles pasillos de la mansión, evocando a cada paso el doloroso recuerdo de su destrozada relación con su padre. La grandeza que le rodeaba parecía ridícula, en contraste con la tristeza emocional que sentía en su interior. Le atormentaban los recuerdos de tiempos mejores, lo que hacía que la amargura presente fuera aún más conmovedora. Se dio cuenta de que había perdido a su padre y a su mejor mentor, amigo y guía

Restos de relaciones