Una rosa roja
Peter y Mary estaban perplejos por la aparición del visitante desconocido. Se preguntaban quién podría ser la persona que dejó la rosa carmesí en la tumba de su hijo. Trataron de analizar el video una y otra vez para buscar cualquier pista sobre la identidad del visitante, pero no pudieron encontrar nada más. Sin embargo, la sola presencia del extraño los llenó de emoción y gratitud, y la rosa carmesí se convirtió en un símbolo de esperanza y amor en su corazón. Habían estado mucho tiempo, tratando de averiguar quién era finalmente la persona que estaba detrás de todo aquel misterio, y pese a que parecía que iban a conseguirlo de un momento a otro, se sentían muy cansados de llevarse decepción tras decepción.

Una rosa roja
Buscando las pistas
Peter también notó algo familiar en la persona misteriosa, pero no pudo poner el dedo en ello. Se preguntaron si se trataba de alguien que conocían, o tal vez de alguien que había sido tocado por la historia de su hijo. Estaban llenos de preguntas, pero sabían que encontrar las respuestas podría ser una tarea difícil. Aun así, decidieron no darse por vencidos y continuar buscando hasta que pudieran descubrir la identidad del visitante enmascarado. Sabían que encontrar la verdad podría llevar tiempo, pero estaban dispuestos a hacer lo que fuera necesario para descubrir la verdad detrás de la misteriosa aparición. No iba a ser todo lo fácil que se había imaginado desde un principio, pero sabía que tenía que seguir adelante.

Buscando las pistas